Las actividades de control y prevención de la rabia deben dirigirse hacia la especie que sea responsable en mayor medida del mantenimiento de la epidemia. Esta podria ser el perro o cualquier otra especie de animales carnívoros silvestres o murciélagos. Si la enfermedad estuviese mantenida de forma enzootica por especies de fauna silvestre, seguiría siendo igualmente importante vacunar a los perros (y a los gatos), ya que ello funciona como barrera que evita la transmisión de la enfermedad hacia las personas.
- Fotografía cortesía del Proyecto contra Enfermedades en Carnívoros del Serengueti